En mi opinión, cualquier tipo de estudio adicional tras la carrera universitaria es enriquecedor tanto para la trayectoria profesional como personal de un estudiante. Es bien sabido que el conocimiento no ocupa lugar, y que aprender abre la mente de las personas no solo para especializarse en un área concreta sino también para tener conocimientos generales del mundo que nos rodea.
Por otro lado, seguir estudiando tras el grado universitario nos aporta nuevas miras hacia dónde queremos llegar y quién queremos ser. Nos ayuda a definir nuestros gustos y forjar nuestras ideas sobre gran variedad de temas. En definitiva, el conocimiento es algo que siempre llevaremos con nosotros y nos hará mejores personas.