¿Por qué permanece el racismo en nuestra sociedad moderna? Es lamentable que sigamos hablando de casos en que distintos grupos de la misma sociedad demuestran un desprecio subyacente, o falta de entendimiento o, mejor dicho, conocimiento, hacía el otro. Recién en las noticias salió una historia de conflicto, impulsado, lo cual se lo presume impulsado por racismo, entre dos grupos étnicos en mi área. Cada uno acusaba al otro de comportamiento inspirado en tal racismo, y de que proponía unos estereotipos. Pero, en el fondo, ¿qué es la causa fundamental? ¿por qué esas historias siguen saliendo cuando nuestro mundo se ha convertido en uno tan internacional? Día a día nuestros países, nuestras propias ciudades de origen, llegan a ser cada vez más multicultural. En esta entrada no pretendo hablar como si fuera un experto en sociología, antropología o las otras disciplinas que sí estudian de manera más profunda este concepto, sino que intento publicar mis opiniones sobre el tema. Creo que, a mi modo de ver, es importante que hablemos cuando vemos un injusto. Entonces, ha de identificar cuáles son las razones que hacen que la gente sea influida por pensamientos racistas. En primer lugar, el racismo es producto de la historia, de conflictos antiguos entre países o naciones que peleaban entre ellos con el fin de conseguir los mejores recursos o el imperio más grande. La competición se filtró por las siguientes generaciones y llega hoy en día estando siempre en el fondo, sin embargo, sin el mismo significado, sin sentido. La competición previa que dio lugar al nacimiento de la aversión entre unas naciones ya no existe en la misma forma, la gente en nuestra sociedad, por lo general, no están afectados por la competición que existe entre los gobiernos de sus países respectivos. Aunque quedan con las ideas de la etapa pasada, con los estereotipos de que hablaron los dos grupos en las recientes noticias. Estos estereotipos no son correctos, no reflejan la verdad del otro lado. Si se vuelve sobre los pasos que conducen hacia los estereotipos modernos, se ve que se basan en insultos, en una sociedad que carecía de conocimiento del grupo que atacaban o insultaban. Y allí vemos la clave, la que nos ayudará mejorar la situación: conocimiento y entendimiento. ¿Cómo podemos juzgar, incluso hasta odiar, un grupo de que no conocemos nada en persona? No podemos, ni debemos. Hay que hacer el esfuerzo, con el objetivo de entender otras culturas, hablar con gente antes de marginalizarla. Es así como, poco a poco, pondremos fin al racismo.